REDUCCIÓN DE PECHO
La cirugía de reducción de pecho agrupa todas las técnicas quirúrgicas que permiten no sólo reducir el tamaño de las mamas sino también remodelarlas y hacerlas más armónicas en relación al resto del cuerpo de la mujer.
LA CIRUGÍA
La cirugía consiste en extraer el exceso de piel, grasa y tejido mamario para disminuir el tamaño del pecho. Para ello, es necesario realizar incisiones alrededor de la areola y verticales, horizontales u oblicuas en el pliegue mamario. Además, se recoloca la areola y el pezón en su nueva posición. La intervención se realiza bajo anestesia general y dura entre dos y cuatro horas.
Es una intervención apropiada para pacientes con un desarrollo mamario excesivo o bien desde la pubertad, como consecuencia de los embarazos o del sobrepeso. La razón fundamental son las molestias ocasionadas por esta circunstancia como dolores de espalda, molestias de cuello, imposibilidad para el ejercicio físico e incluso trastornos psicológicos.
CUIDADOS POSTOPERATORIOS
A las 24 horas la paciente recibe el alta médica. Desde este momento, las recomendaciones médicas son: evitar esfuerzos, no coger peso, no hacer ejercicio durante un tiempo y utilizar un sujetador especial. Pero, sobre todo, acudir regularmente a las revisiones con el cirujano plástico y a las sesiones de fisioterapia para favorecer la recuperación y los resultados.
CUALES SON LOS RESULTADOS TRAS UNA INTERVENCIÓN DE REDUCCIÓN MAMARIA
EL DIAGNÓSTICO
Existen muchas técnicas para reducir el volumen del pecho en función de cada caso y perfil de la paciente. Por este motivo, la valoración anatómica de la mama es fundamental. El cirujano plástico debe tener en cuenta si las proporciones son correctas, si tiene alguna deformidad asociada y medir la distancia del complejo areola-pezón. Según cada caso, se utilizarán técnicas más sencillas con cicatrices periareolares o verticales u otras más complicadas que necesitarán abordajes en T invertida.
EL POST-OPERATORIO Y RECUPERACIÓN DE UNA OPERACIÓN DE REDUCCIÓN DE PECHO
Recomendaciones
Una vez finalizada, se coloca a la paciente un sujetador especial durante un tiempo que ayudará a mantener la forma y la posición de los implantes hasta que finalice el proceso de cicatrización.
REDUCCIÓN DE PECHO
La cirugía de reducción de pecho agrupa todas las técnicas quirúrgicas que permiten no sólo reducir el tamaño de las mamas sino también remodelarlas y hacerlas más armónicas en relación al resto del cuerpo de la mujer.
Es una intervención apropiada para pacientes con un desarrollo mamario excesivo o bien desde la pubertad, como consecuencia de los embarazos o del sobrepeso. La razón fundamental son las molestias ocasionadas por esta circunstancia como dolores de espalda, molestias de cuello, imposibilidad para el ejercicio físico e incluso trastornos psicológicos.
EL DIAGNÓSTICO
Existen muchas técnicas para reducir el volumen del pecho en función de cada caso y perfil de la paciente. Por este motivo, la valoración anatómica de la mama es fundamental. El cirujano plástico debe tener en cuenta si las proporciones son correctas, si tiene alguna deformidad asociada y medir la distancia del complejo areola-pezón. Según cada caso, se utilizarán técnicas más sencillas con cicatrices periareolares o verticales u otras más complicadas que necesitarán abordajes en T invertida.
LA CIRUGÍA
La cirugía consiste en extraer el exceso de piel, grasa y tejido mamario para disminuir el tamaño del pecho. Para ello, es necesario realizar incisiones alrededor de la areola y verticales, horizontales u oblicuas en el pliegue mamario. Además, se recoloca la areola y el pezón en su nueva posición. La intervención se realiza bajo anestesia general y dura entre dos y cuatro horas.
EL POST-OPERATORIO Y RECUPERACIÓN DE UNA OPERACIÓN DE REDUCCIÓN DE PECHO
CUIDADOS POSTOPERATORIOS
A las 24 horas la paciente recibe el alta médica. Desde este momento, las recomendaciones médicas son: evitar esfuerzos, no coger peso, no hacer ejercicio durante un tiempo y utilizar un sujetador especial. Pero, sobre todo, acudir regularmente a las revisiones con el cirujano plástico y a las sesiones de fisioterapia para favorecer la recuperación y los resultados.
Recomendaciones
Una vez finalizada, se coloca a la paciente un sujetador especial durante un tiempo que ayudará a mantener la forma y la posición de los implantes hasta que finalice el proceso de cicatrización.